En un intento por reparar los lazos familiares, mi hermanastra y yo nos retiramos a mi morada para recibir algo de terapia.Sin invitación, su voluptuosa amiga Alice se cuela, encendiendo un encuentro caliente.Con sus amplias curvas y su apetito insaciable, ella satisface hábilmente mi deseo palpitante, culminando en una liberación satisfactoria.