La criada Sheila Grant, con su figura curvilínea y su insaciable apetito por el juego de pies, no deja piedra sin mover en este caliente encuentro. Mira cómo atiende habilidosamente a David Perry, disfrutando de los placeres orales antes de tomarlo profundamente adentro. ¿El resultado? Una carga desordenada en su hinchado paraíso fetichista de pies